El trecho del río Serpis (riu d'Alcoi) que discurre entre las localidades de Villalonga y Lorcha es conocido como Racó del Duc (Rincón del Duque) o Barranc de l'Infern (Barranco del Infierno).
Este antiguo trazado ferroviario, convertido en Vía Verde, es uno de los lugares para pasear más bonitos y tranquilos de la Comunidad Valenciana. Puedes ver más información y fotos de la Vía Verde del Serpis en la web de KINAUTAS.
El recorrido nos enseña un entorno kárstico salpicado con zonas de bosque de ribera. Tras atravesar distintos túneles y puentes alcanzamos la antigua estación de L'Orxa ante la que se alza el castillo de Perputxent.

El río Serpis es el más caudaloso de la provincia de Alicante y su único curso de agua permanente durante todo el año
El tramo más bonito de la Vía Verde del Serpis
Adecuada para la práctica de senderismo y ciclismo por su accesibilidad y continuidad, la ruta del Racó del Duc es el recorrido más popular de la Vía Verde del Serpis. Iniciando el camino desde Villalonga, dejamos el coche cerca de la antigua cantera de piedra a la salida del pueblo.
Aquí encontramos el que es el único panel informativo de la ruta. Hay que estar atentos a los márgenes del río para no perderse ninguno de los elementos arquitectónicos dispersos a lo largo del trayecto. Y atentos también a los coches porque, aunque es considerada vía verde, el tránsito de vehículos a motor está permitido.

El primer tramo es un camino de cemento con fuerte pendiente descendiente que enlaza con la antigua plataforma del tren que, hasta 1969, unía Alcoy y Gandía. A partir de este punto el camino no tiene desnivel apreciable y, en ligero ascenso, permanece siempre paralelo al río. Es un camino pedregoso, pero fácil y muy agradecido por las vistas continuas al bosque de ribera que rodea al río.
Al cabo de poco más de un kilómetro, nos encontramos en la distancia con el primer salto artificial de agua, el azud de L‘ Esclapissada, que en otro tiempo derivaba el agua hacia una de las fábricas de luz.
Las fábricas de luz generaban electricidad a pequeña escala aprovechando el caudal del río Serpis, que era desviado en parte hacia las centrales mediante los azudes.
En el tramo Lorcha-Villalonga hay cinco de estas pequeñas centrales hidroeléctricas:
- Fàbrica de Reprimala.
- Fàbrica del Cèntim.
- Fàbrica de la Mare de Déu.
- Fàbrica del Racó del Duc.
- Fàbrica de L’ Infern.
Seguimos la ruta hasta que nos encontramos con la Mina Llarga o Fosca, el más largo de los túneles que en otro tiempo permitía el paso del tren a través de la sierra de la Safor. A pesar de los aliviaderos, hay zonas de total oscuridad y es necesario el uso de linterna.

Durante los siguientes kilómetros nos adentramos en otros túneles, más cortos y menos oscuros, y sobrepasamos los restos de edificaciones ya abandonadas. A mitad del recorrido se encuentra la edificación mejor conservada, la Fábrica del Infierno. Este lugar es considerado el límite entre las provincias de Alicante y Valencia.

Al alcanzar este punto cruzamos al margen izquierdo de río a través de un pontón metálico construido tras el desmantelamiento del puente original del tren.
En los últimos kilómetros el camino está menos protegido del sol, por lo que resulta un poco más duro por el calor. El recorrido lo terminamos en la estación de Lorcha, aún en pie, frente a la Fábrica de Papel y a los pies del castillo árabe de Perputxent. Aunque se puede prolongar por camino asfaltado hasta el mismo pueblo.
Puntos de interés del itinerario Villalonga - Lorcha
El tramo de Vía Verde que une estos dos pueblos alicantinos nos proporciona un acercamiento a la actividad industrial que se desarrollaba en la zona en torno al antiguo trazado ferroviario que unía Gandía y Alcoy. Se le conoció como "tren de los ingleses" y estuvo en funcionamiento 76 años hasta 1969.
Fuera de nuestro camino y antes de llegar a la cantera, tras la cual comenzamos la ruta, se encuentra la primera de las fábricas de luz: la Fábrica de Reprimala, que con anterioridad fue fábrica de papel y molino de harina. A la izquierda vemos una fuente en la que la gente hace cola para rellenar botellas de agua. Es la Fuente de Reprimala de la que se dice que emanan aguas medicinales.
El primer punto de interés ya dentro de nuestro recorrido es l'Assut de l'Esclapissada. Más adelante, en bastante mala condición, oculta en la maleza vemos la Fàbrica del Cèntim (Fábrica del Céntimo) o dels Ullals (de los Colmillos).
Luego, la Mina Llarga o Fosca, el primero y más largo de los túneles con 250 metros de longitud. Está indicado como número 8 en el arco de entrada ya que la numeración de los túneles comienza en Alcoy. Muy cerca de aquí encontramos la Fàbrica Mare de Déu (en bastante mal estado) y el azud que lleva el mismo nombre.
A continuación nos topamos con la Mina de Onofre, un túnel de 150 metros, el segundo más largo del recorrido. Le sigue el paraje del azud del Racó del Duc, de los más hermosos del camino. Más adelante, la Fàbrica del Racó del Duc.

El túnel más pequeño es el de la Mina de Morú de unos 20 ó 30 metros. Tras un centenar de metros nos encontramos con el enlace al sendero PRV-42, que conduce al Cim de la Safor y Font de la Mata. Acto seguido nos topamos con el azud de Morú.
Atravesamos otro túnel corto, esta vez el de la Mina de la Garrofera (40 metros). Unas decenas de metros después encontramos los restos de la caseta de la Garrofera con una gran flecha pintada en rojo.
Escondida entre la vegetación, divisamos a lo alto desde el camino el enigmático edificio de la Fàbrica de l'Infern con arquitectura del siglo XIX. Cruzando el pontón metálico cambiamos a la margen izquierda del río y también de provincia, ya que nos encontramos en el Límite Lorcha-Vilallonga. Seguimos andando y encontramos antiguas casetas del ferrocarril y un depósito de agua.
Tras atravesar el último túnel, el de la Mina de Lorcha de 130 metros, vemos estructuras interesantes como la del Molí d’Enmig (un antiguo molino de trigo) y la Font de Botero.
Ya casi llegando a nuestro destino, vemos desde la altura la antigua Fábrica de Papel. Finalmente, llegamos a la Estación de Lorcha que nos deja a los pies del Castillo de Perputxent, al que no hemos podido subir por los desprendimientos. Esta fortificación musulmana data del siglo X y fue reconvertida en residencia cristiana sobre el xiglo XIII.

En definitiva, el tramo de la Vía Verde del Serpis que va de Villalonga a Lorcha es un camino perfecto para hacer una buena caminata con los amigos, con tu perro o en bici. Otro recorrido ideal para pasar el día en familia es la Vía Verde del Mar en Castellón.
Mapa topográfico
